Empezamos junto a los magníficos chopos del Río Sever. Más adelante, subimos por la calzada medieval entre alcornocales, rebollares y bosques de castaño. En la cima, en Nuestra Señora de la Estrela, la panorámica es magnífica, desde ella podemos divisar los crestones cuarcíticos de la frontera de Galegos y el Pico de S. Mamede. Bajamos por la calzada medieval y nos dirigimos a Abegoa. Seguimos por un paisaje en el que domina el roble, acompañado de alcornoques en las zonas más secas. En Fonte Souto merece una referencia una capilla en muy mal estado de conservación y dos sepulturas medievales excavadas en roca.
Empezamos junto a los magníficos chopos del Río Sever. Más adelante, subimos por la calzada medieval entre alcornocales, rebollares y bosques de castaño. En la cima, en Nuestra Señora de la Estrela, la panorámica es magnífica, desde ella podemos divisar los crestones cuarcíticos de la frontera de Galegos y el Pico de S. Mamede. Bajamos por la calzada medieval y nos dirigimos a Abegoa. Seguimos por un paisaje en el que domina el roble, acompañado de alcornoques en las zonas más secas. En Fonte Souto merece una referencia una capilla en muy mal estado de conservación y dos sepulturas medievales excavadas en roca.