El mayor recorrido pedestre de las Azores rodea la isla más antigua del Archipiélago (± 8 millones de años), donde se encuentra un valioso patrimonio geológico y paleontológico, en particular, el mayor yacimiento de fósiles a cielo abierto del Atlántico norte. Ofrece paisajes únicos en la región, como Barreiro da Faneca, considerado el “desierto rojo de las Azores”, y otros peculiares, como los paisajes vinateros de la Bahía de Maia y de São Lourenço. Además, destacan las casas típicas de Santa Maria, que en la zona este de la isla se dispersan por el paisaje, como puntos blancos sobre el verde del terreno.
El mayor recorrido pedestre de las Azores rodea la isla más antigua del Archipiélago (± 8 millones de años), donde se encuentra un valioso patrimonio geológico y paleontológico, en particular, el mayor yacimiento de fósiles a cielo abierto del Atlántico norte. Ofrece paisajes únicos en la región, como Barreiro da Faneca, considerado el “desierto rojo de las Azores”, y otros peculiares, como los paisajes vinateros de la Bahía de Maia y de São Lourenço. Además, destacan las casas típicas de Santa Maria, que en la zona este de la isla se dispersan por el paisaje, como puntos blancos sobre el verde del terreno.